Sudoración extrema en niños: ¿A qué se debe? Hay situaciones en las que los niños sudan profusamente aunque no vayan demasiado abrigados ni estén en una habitación demasiado caldeada. Este fenómeno puede producirse tanto de día como de noche. Pero, ¿cuánto es sudar demasiado y cuándo deben empezar a preocuparse los padres?
¿Qué dicen los pediatras experimentados sobre la sudoración extrema en los niños?
Los padres suelen acudir al pediatra, y con razón, porque encuentran inusual la sudoración de su hijo. Sin embargo, en la mayoría de los casos, la sudoración abundante no es motivo de preocupación. La sudoración es una función natural e importante del organismo que ayuda a regular la temperatura corporal y a evitar el sobrecalentamiento. La evaporación del sudor enfría la superficie de la piel.
La intensidad de la sudoración puede variar mucho de un niño a otro. Mientras que algunos niños apenas sudan, otros lo hacen al menor esfuerzo. La actividad del niño también influye: los niños que corren y juegan mucho sudan naturalmente más que los que prefieren actividades más tranquilas. Así que la situación aquí es similar a la de los adultos y su estilo de vida. El siguiente vídeo también lo explica muy bien:
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Nutrición e ingesta de líquidos: influencia en la sudoración
En Nutrición y la cantidad de líquido consumido pueden influir en la sudoración de los niños. Ciertos alimentos, como las especias picantes o los alimentos muy procesados, pueden aumentar la producción de sudor. Tiene sentido asegurar una dieta equilibrada y sana, rica en fruta, verdura y productos integrales. El niño también debe beber suficiente agua para mantener el equilibrio de líquidos. La deshidratación puede suponer un esfuerzo adicional para el organismo y estimular aún más la producción de sudor. También debe asegurarse de que su hijo beba regularmente, sobre todo en los días calurosos o durante una actividad física intensa.
Ropa y medio ambiente: consejos para reducir la sudoración
Elegir la ropa adecuada y organizar el entorno puede ayudar a reducir la sudoración en los niños. La ropa ligera y transpirable de fibras naturales como el algodón ayuda a regular la temperatura corporal y permite que la piel respire. Por el contrario, deben evitarse los materiales sintéticos, ya que pueden acumular sudor y provocar irritaciones cutáneas. También hay que procurar un entorno bien ventilado, sobre todo en verano. Un ventilador o el aire acondicionado pueden ayudar a mantener la temperatura ambiente suficientemente baja. Los descansos regulares a la sombra y evitar la luz solar directa también pueden reducir la sudoración excesiva y proporcionar al niño un confort adicional.
El niño suda por la noche: sudoración extrema en los niños por la noche
No es raro que los niños suden mucho, sobre todo por la noche. Pero, ¿a qué puede deberse? La sudoración intensa por la noche puede tener varias causas, pero a menudo se debe a sueños intensos o a una predisposición individual. Mientras el niño esté sano, el dormitorio esté suficientemente fresco y la ropa de dormir sea adecuada, no suele haber motivo de preocupación. Sólo es importante asegurarse de que la sudoración no va acompañada de falta de aire. Esto podría indicar problemas de salud más graves.
¿Es la sudoración extrema en los niños un signo de enfermedad grave?
Si un niño crece con normalidad y se desarrolla saludablemente, no suele haber motivo de preocupación. Sólo se vuelve crítico cuando el niño suda profusamente incluso al menor esfuerzo y posiblemente muestre signos de dificultad respiratoria. Esto puede ocurrir en bebés con un defecto cardíaco congénito o enfermedades pulmonares graves. En estos casos, es importante acudir al médico. Si cada vez hay más indicios, es mejor ponerse en contacto con un médico demasiado pronto que demasiado tarde.
Ayuda de un dermatólogo para la producción excesiva de sudor
En niños mayores y adolescentes, la sudoración intensa puede deberse a menudo a cambios hormonales durante la pubertad. Las glándulas sudoríparas trabajan más intensamente y se producen cambios en el entorno bacteriano de la piel, que pueden afectar al olor corporal. Una mayor higiene y la elección de un desodorante adecuado pueden ayudar en este caso. Sin embargo, si el nivel de sufrimiento es muy elevado, un dermatólogo puede prescribir productos especiales o sugerir otras opciones de tratamiento. Afortunadamente, esto no es necesario para la mayoría de los niños. Sin embargo, no hay que olvidar que los niños y los padres pueden experimentar diferentes niveles de malestar.
Sudoración intensa en niños: trastornos metabólicos como posible causa
En raras ocasiones, la sudoración extrema puede indicar un trastorno metabólico. Por ejemplo, puede indicar problemas con la glándula tiroides. Si no está seguro de si la sudoración de un niño se encuentra dentro de los límites normales o de si existe una enfermedad subyacente, es aconsejable que lo comente con su pediatra. Un examen exhaustivo puede aportar claridad y detectar cualquier problema de salud en una fase temprana.
Sudoración extrema en niños: Nuestra conclusión
La sudoración intensa en los niños suele ser inofensiva y varía de una persona a otra. Mientras el niño esté sano y no presente otros síntomas, no suele ser motivo de preocupación. En los niños que sudan mucho por la noche, los sueños intensos durante el sueño también pueden ser la causa. Por lo demás, sin embargo, es importante acudir al médico ante cualquier duda o síntoma adicional para descartar enfermedades graves y tomar rápidamente las medidas de tratamiento adecuadas en caso necesario.
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